sábado, 16 de agosto de 2008

Una luz colonial


El viento mece las copas de los arboles mientras la lluvia baña a la comunidad de sus verdes hojas otorgandole humedad, que con una sabia perseverancia supieron esperar...
La lluvia cae precipitadamente sobre el asfalto, solo iluminado por un solitario farol colonial, tipico de las calles salteñas, pues, a pesar de ser noche de luna llena, esta permanece oculta tras los espesos nubarrones que, al parecer, llegaron para quedarse y no se iran no bien aclare el dia con un fresco amanecer....
La ciudad yace bajo un manto frio y neblinoso mientras que dentro de los calidos hogares, todos duermen en derredor , salvo algunas exepciones...que observan a la lluvia caer mas alla de la ventana; abierta de par en par, con el fin de invitar a la brisa que trae la madrugada.Para que refresque nuestros atribulados sueños cristalinos que vagan con mansedumbre por sobre la profundidad del abismo de nuestro ser...
Son sueños que emergen como burbujas de cristal por un mar de alucinaciones psicodelicas en donde las iluminadas ideas nadan hasta colapsar o impactar con abtractos pensamientos dendo lugar a nuevas creaciones de vivos colores que salen a la superficie.Y asi poder volar y envolver al mundo de alegrias que renaceran de los corazones que antes estuvieron presos en jaulas de temor y encerrados en frascos de dolor ...para salir a la libertad y asi vivir la Vida.Porque la Vida se vive con libertad en ella y en las emociones.